miércoles, junio 25, 2008

Esperanza


Un día van a ser historia, como las cosas malas del pasado, como un vicio vergonzante y superado al fin. Van a estar a la altura de la adicción al juego o al alcohol.

Un día sencillamente se van a tener que ir, con el rabo entre las piernas y una maratón de pateadores de culos siguiendolós con entusiasmo cívico y patriótico.
Uno de estos días y mucho más cercano que el 2011 ella tendrá que empacar sus modelitos de nueva rica sin gusto ni estilo y el tendrá que dormir en otra cama que ella
(Habremos avanzado mucho pero no creo que para esa época la carcel sea mixta).
Y van a ir presos, si.. a menos que los cómplices de ahora se las arreglen para convencerlos de que lo mejor que pueden hacer es irse antes de que sea imposible salir.

No es cuestión de agitar tanto las aguas mi querido presidente de facto en ejercicio.
Digo, no es cuestión de hacer tanto bardo y después pretender el bronce. No es cuestión de llamar a los otros cosas feas, insultarlos, rebajarlos, tratar mal a medio mundo y después poner esa cara de idióta estrábico que tan bien le sale. O querer dejarnos así, sin más, sin sufrir ni una pequeña revancha.

Su cuenta esta en en rojo y se acerca el tiempo de pagar y no aceptamos más esa tarjeta que presenta de luchador por los derechos humanos. Porque ya averiguamos que a pesar de tener cantidad de garantes ninguno tiene tampoco fondos en su cuenta.


El día se acerca..

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